Un soufflé de queso es un bocado delicioso y sabroso que desaparece de los ramekines a la velocidad de luz.
El soufflé de queso es un aperitivo perfecto o plato principal muy fácil de preparar, su textura es muy ligera y agradable y se prepara en el horno con bechamel, queso, y huevos. Admite otros ingredientes dulces y también salados, a vuestro gusto.
Soufflé de queso
Ingredientes
- 25 g de mantequilla + mantequilla para untar los moldes
- 1 cucharada de harina
- 150 ml de leche entera
- 75 de queso rallado yo puse 50 de cheddar y 25 de parmesano
- 3 yemas
- 4 claras
- 1/2 cucharadita de mostaza
- 1 manojito de cebollino
- sal
Elaboración paso a paso
- Encendemos el horno a 200C
- Untamos con la mantequilla y espolvoreamos con queso los ramekines.
- Picamos el cebollino.
- En un cazo, a fuego moderado, derretimos la mantequilla (sin quemarla) y añadimos 1 cucharada de harina. La sofreímos, todo el rato removiendo, 1 minuto.
- Añadimos leche, una pizca de sal y, todo el rato removiendo, la cocemos hasta que espese.
- La dejamos 5 minutos a que se enfríe y vamos añadiendo las yemas, una a una.
- Añadimos la mostaza.
- Añadimos el queso, el cebollino (reservamos un poco para adornar los soufflé) y removemos.
- Montamos, a máxima potencia, las claras.
- Añadimos la mezcla de bechamel, yemas y queso a las claras. Removemos con mucho cuidado, con movimientos de abajo arriba. No insistas mucho, si queda algún que otro grumo pequeño de las claras no pasa nada. "Menos es más".
- Repartimos la masa a los ramekines y horneamos unos 10- 15 minutos o hasta que el soufflé quede doradito.
- Y aquí está nuestra maravilla, ¡recién salida del horno!.
Apuntes sobre la receta soufflé de queso
Para que nos salga esponjoso, hemos de montar muy bien las claras. Para comprobar si están bien montadas tenemos de volcar el bol boca bajo y las claras no han de caerse.
Eso sí, vete volcando el bol poco a poco. Si ves que las claras se están moviendo, vuelve a montarlas (a máxima potencia) un poco más y vuelve a hacer la prueba.
Como veis, es fácil.
Puedes usar el queso que te guste pero también pon un poco de parmesano. Le da muy buen sabor a soufflé.
Necesitarás 4 ramekines de 9 cm de diámetro o un molde grande de 700-800 ml de capacidad.
Explicación, paso a paso con fotos:
Encendemos el horno a 200C
Untamos con la mantequilla y espolvoreamos con queso los ramekines.
Picamos el cebollino.
En un cazo, a fuego moderado, derretimos la mantequilla (sin quemarla) y añadimos 1 cucharada de harina. La sofreímos, todo el rato removiendo, 1 minuto.
Añadimos leche, una pizca de sal y, todo el rato removiendo, la cocemos hasta que espese.
La dejamos 5 minutos a que se enfríe y vamos añadiendo las yemas, una a una.
Añadimos la mostaza.
Ponemos el queso, el cebollino (reservamos un poco para adornar los soufflé) y removemos.
Montamos, a máxima potencia, las claras.
Añadimos la mezcla de bechamel, yemas y queso a las claras. Removemos con mucho cuidado, con movimientos de abajo arriba. No insistas mucho, si queda algún que otro grumo pequeño de las claras no pasa nada. «Menos es más».
Repartimos la masa a los ramekines y horneamos unos 10- 15 minutos o hasta que el soufflé quede doradito.
Y aquí está nuestra maravilla, ¡recién salida del horno!.
Tened en cuenta que el soufflé se baja muy rápido. Se suele decir que los invitados esperan al soufflé, no al revés.
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¡Hasta pronto!