En un recipiente grande pon la levadura desmenuzada.
Añade el agua de unos 25ºC.
Añade el azúcar. Remueve hasta que se diluya el azúcar y la levadura.
Añade el aceite y remueve.
Tamiza la harina.
Añade la sal. Remueve hasta que dejas de ver las partículas de harina.
Cierra el recipiente y deja la masa en reposo durante 20 minutos.
Pasado el tiempo moja las manos en agua y dobla la masa en forma de sobre. Las manos se mojan para que no se pegue la masa al manipularla.
Cierra el recipiente y deja la masa en reposo durante otros 20 minutos.
Pasado tiempo vuelve a doblar la masa en forma de sobre. Doblamos la masa en forma de sobre para desarrollar el gluten.
Vuelve a dejar la mas en reposo otros 20 minutos.
Dobla la masa en forma de sobre otra vez.
Toma 3 ó 4 bolsitas de plástico y úntalas por dentro con un chorlito de aceite de oliva virgen extra.
Pesa la masa y divídela en 3 ó 4 trozos, para hacer 3 pizzas grandes o 4 medianas.
Reparte los trozos de masa en las bolsas, cierra y guardadas en la nevera mínimo 24 horas máximo 96 horas, de 1 a 4 días.
Reposar la masa en la nevera al menos 24 no es una excentricidad sino durante este tiempo la masa de pizza acumula el sabor y aroma. Por ejemplo a mi particularmente me gusta la masa que tenga 2 días de reposo y más.
Al día siguiente saca las bolsitas con la masa de la nevera.
Aparta una para hacer la pizza y los otros trozos de masa deshínchalas.
La masa que no vas a usar es necesario que la deshinches que cada dia, para que se destruya el gluten. El dia que la vas a usar no hay que deshincharla.
La masa para pizza esta lista para ser usada.
Ahora te invito a ver cómo yo hago la pizza desde el principio y hasta que salga del horno.
Para empezar espolvoreo la mesa con harina.
Abro la bolsa y vuelco la masa sobre la mesa espolvoreada. Le doy a la masa forma de una bola y la dejo en reposo.
A continuación pongo a calentar el horno. Para sacarle al horno el máximo calor del que es capaz, lo pongo al máximo. Pongo la función sólo de abajo pero si no lo tienes esta función, pon de arriba y abajo.
En el fondo del horno pongo la piedra para hornear panes y pizzas, para que vaya acumulando el calor en su interior y luego se lo trasmita a la pizza.
Si no tienes una piedra así, te recomiendo que la compres, sobre todo si te gusta comer buenas pizzas y panes caseros. En tiendas de menaje hay una gran variedad de ellas. También la puedes sustituir con unas baldosas de terracota de 1 centímetro centímetro. Las puedes encontrar por poco dinero en las tiendas del material para construcción.
Caliento la piedra de 50 minutos a 1 hora.
Ahora me pongo con la salsa.
Tomo un bote de tomate triturado.
Lo abro y lo pongo en un colador, para que suelte el agua de tomate. Y la dejo así durante 15 minutos.
La salsa para para pizza tiene que estar bien espesita, para que no se moje la masa.
La pongo en un plato y la aderezo con sal, azúcar y aceite de oliva virgen extra. Al gusto. La salsa para la pizza esta lista.
Así es, no la cuezo. Y creerme, esta riquísima y es ideal PARA LA PIZZA. Fácil, rápido y tremendamente rico.
Voy hacer la famosa pizza caprichosa. Esta pizza lleva salsa de tomate, jamón cocido o curados aceitunas negras, champiñones alcachofas y queso mozzarella.
Los champiñones se pueden poner crudos pero a mí me gusta pasarlos un par de minutos por la sartén. Hechos asi me saben mas ricos.
No me gustan en la pizza aceitunas enteras, sino cortadas en rodajas.
Las alcachofas que voy a poner son unas confitadas que hice el otro día. Las de la lata también sirven.
Cuando falten 10 minutos para que termine de calentarse el horno, estiro la masa en un circulo de 32 - 34 centímetros. Lo hago con tranquilidad y cariño. Se puede estirar la masa con ayuda de un rodillo pero me gusta muchísimo más estirada con la mano. Eso le aporta a la pizza mucha autenticidad, sale más rica.
Pongo la masa sobre el papel para hornear.
La unto con salsa de tomate.
Pongo por encima jamón. Yo prefiero curado.
Pongo champiñones.
Aceitunas.
Y finalmente el queso.
Espolvoreo con una pizca de albahaca, de orégano y de sal.
Meto la pizza al horno y enseguida pongo el grill con ventilador. Si no tienes esta opción, pon solo grill.
Horneo la pizza hasta que sus bordes queden tostados.
Debido a que mi horno pega más fuerte por un lado que por otro, a la mitad de cocción la giro a 180ºC
Mi pizza tardó en hornearse de 7 a 8 minutos. La tuya puede tardar más o menos, según la potencia de tu horno.
La saco del horno y enseguida la sirvo.
Al día siguiente he preparado mi pizza favorita: pizza con mozzarella di bufala.
La mozzarella di búfala tiene más sabor que la normal. Que es bastante tontorrona.
A la vez que encendí el horno para que se calentara, corté la mozzarella en rodajas. Y las coloqué sobre una servilleta para que soltaran la leche demás que tienen.
A parte de mozzarella di bufala a esta pizza me gusta añadir pequeños trocitos de gorgonzola picante, para darle a la pizza más sabor.
10 minutos antes de que terminase de calentarse el horno, estiré la masa.
Puse por encima la salsa de tomate.
Lo metí al horno durante 4 minutos.
No puse el queso para que no se me deshiciera convirtiéndose una masa. Es mucho más rico cuando los trozos de mozzarella se hayan fundido y soltado la leche pero no se hayan deshecho.
Pasados 4 minutos del horneado puse los quesos y horneé la pizza hasta que sus bordes quedaron tostados.