El agua ha de estar a unos 28 - 30ºC. Es decir, un poquito más fría que la temperatura del cuerpo humano. Si tu harina tiene entre 11% y 12% de proteínas pon solo 300 g de agua. Si tiene mas de 12 % de proteínas pon 320 g de agua.
Tamiza la harina.
Añade la sal.
Con ayuda de una cuchara remueve muy bien.
Coge un recipiente y úntalo con pequeña cantidad de aceite.
Pon dentro la masa.
Cierra el recipiente y, directamente, guarda la masa en la nevera entre 12 y 14 horas. En verano ponla en la parte más fría de la nevera: en la balda que está más cerca del congelador. Y en invierno al contrario, en la balda que esta más alejada del congelador.
Guardamos la masa en la nevera para qua acumule el sabor y el aroma.
Saca la masa de la nevera.
Espolvorea la mesa con harina.
Vuelca la masa sobre la mesa espolvoreada.
Estira la masa en una rectángulo de 20x25 cm. Manipúlala con cuidado y cariño, para no deshincharla mucho.
Por el lado más largo enrolla la masa.
El rollo obtenido corta en dos.
Cierra las puntas.
Tapa las piezas obtenidas con una toalla y déjalas en reposo hasta que se hinchen. A 20 - 22ºC aproximadamente 1 hora. A temperatura más alta un poco menos de tiempo y a temperatura mas baja un poco más.
Cuando falten 35 minutos para que termine el levado enciende el horno a 250ºC con calor sólo de abajo. Si no tienes esta función, pon el calor de arriba y abajo.
En el fondo del horno pon una bandeja para echar el agua.
Y la piedra para hornear panes y pizzas.
Pon las piezas de masa sobre un papel para hornear y estíralas. Manipula la masa con cuidado y cariño, para no deshincharla mucho.
Mete el pan dentro del horno. Si no tienes una piedra para hornear, hornealo en una bandeja.
En la bandeja del fondo echa un vaso de agua hirviendo.
Pasados 10 minutos pon el calor de arriba y abajo.
Hornea el stirato 10 - 12 minutos más o hasta que quede como a ti te gusta.
Saca el pan del horno.
Ponlo sobre una rejilla para que al enfriarse no se humedezca la corteza.