Pela y pasa por la prensa ajos un pequeño diente de ajo o la mitad de uno.
Es mejor quedarse corto de ajo y añadir un poco más si hace falta que pasarse. Si no tienes una prensa de ajos, rállalo o pícalo muy, muy fino con ayuda de un cuchillo.
Añade al queso 2-3 cucharadas de mayonesa.
Remueve y, antes de consumir deja que repose, en la nevera, durante unos 15-20 minutos.
Antes de meter el paté de queso en la nevera, tápalo con un trozo de film transparente.