Enjuaga bajo el grifo los boletus y ponlos en una cazuela con 1,5 l de agua. Déjalos así durante media hora para que se hidraten.
Mientras tanto prepara la pasta (si la vas hacer).
Pasado tiempo pon la cazuela con setas y agua en la que se estaban remojando a fuego alto y lleva a ebullición. En cuanto rompa a hervir, haz el fuego medio y cuece unos 10 minutos.
Lava, pela y ralla finamente la zanahoria.
Lava, pela y corta en dados de 2 centímetros la patata.
Pica finamente la chalota, el diente de ajo y el perejil.
En una sartén pon un chorro de aceite y, a fuego medio, dora la chalota.
Añade la zanahoria, rehógala durante unos 2 minutos y retira la sartén del fuego.
Añade la patata a la cazuela y 1 cucharadita rasa de sal.
En cuanto rompa a hervir, haz el fuego medio y cuece la patata durante 5 minutos.
Añade los champiñones...
... y pasta fresca.
Cuece, a fuego medio, hasta que la pasta esté hecha y añade el sofrito de zanahoria, el perejil y el ajo finamente picados.
Remueve, añade una pizca de pimienta negra molida y, si hace falta, rectificar de sal.