Limpiamos y cortamos las setas en trocitos de unos 3 centímetros.
Picamos finamente la chalota y el ajo y el perejil.
Es importante que lo piques todo muy, muy fino. Si no tienes chalota, la puedes sustituir con una cebolleta pero con chalota queda mejor.
En una sartén de fondo ancho calienta a fuego alto 0,5 centímetro de aceite.
En la sartén de fondo ancho las setas tendrán suficiente espacio para dorarse. En una sartén de fondo pequeño se te amontonarán y en vez de dorarse se te cocerán.
Una vez que el aceite está bien caliente, añade las setas.
A fuego alto, saltéalas durante unos 5-7 minutos o hasta que queden como a ti te gusta.
Añade la chalota, el ajo y el perejil finamente picados.
Saltea 1 minutos más, salpimenta y retira la sartén del fuego.