Hola amigos, soy Svieta. Hoy os enseño a preparar un plato de ternera ruso muy típico y apreciado por su exquisito sabor y jugosidad. Se hace de forma muy sencilla y rápida.
Yo aquí tengo 350 a 380 gramos de carne de solomillo de ternera. Cortamos la carne en tiras prestando atención a cortarlas en contra de las fibras.
Añadimos una cucharadita de harina por encima de la carne y la enharinamos ligeramente con la ayuda de las manos.
En una sartén añadimos un dedo de aceite y la calentamos a fuego alto. Cuando veas que el aceite está bien caliente, echamos la carne a la sartén.
A fuego muy alto, la cocinamos un minuto. Verás que cambia de color y retira la de la sartén.
En el mismo aceite y ya sin la carne, ponemos la cebolla, es importante dorar la cebolla, no pocharla y la doramos a fuego alto.
Una vez la cebolla este dorada, retiramos de la sartén el exceso de aceite dejando solo la cantidad mínima.
Y devolvemos a la sartén la carne junto con la cebolla.
Añadimos una cucharadita de tomate concentrado y rehogamos un minuto. Es importante utilizar tomate concentrado.
Cuando veas que el tomate ya está repartido, apagamos el fuego y añadimos 2 cucharadas o unos 130 gramos de creme fraiche o nata fresca. Es importante que apagues el fuego, la nata no tiene que hervir en ningún momento.
La salsa termina de hacerse con el calor residual de la sartén y de la placa.
Añadimos sal al gusto y pimienta negra molida. Lo tapamos y antes de servir lo dejamos en reposo un par de minutos más.
Espolvoreamos por encima con un poquito de perejil. Ya está lista para servir